Este tratamiento es la mejor opción para la sudoración excesiva en las axilas. Consiste en inyectar la toxina botulínica directamente sobre las glándulas sudoríparas con el objetivo de detener la secreción de sudor. Dura aproximadamente una hora.
Después del día 2 disminuirá progresivamente el sudor, y a partir del día 10, no verás más sudor en tus axilas.